38ª jornada. HONROSO SÉPTIMO PUESTO

Santa Marta: Juan Jesús, Fermín, Rufo (Álvaro, 68’), Borja (Andrés, 73’), Carlos, Peri, Joselino (Ritoré, 60’), Valdivia, Miguel Angel, Javi Ramos, Lolo Conde.

Moralo: César Carrasco, Dani, Arellano, Andrada, Barbero, Fran Mancha, Toribio (Miguel Ángel, 55’), Oliver, Jarillo, Manu (Piti, 62’) y Robert (Juli, 66’).

Árbitro: Gómez-Landero Ossorio, de la delegación de Badajoz. Regular por ser excesivamente casero. Expulsó con tarjeta roja directa al visitante Andrada (23’). Además mostró amarilla a los locales Rufo, Joselino y Lolo Conde; y a los moralos Barbero y Oliver.

Goles: 1-0 Carlos (30’). 2-0 Lolo Conde (43’). 3-0 Peri (45’). 4-0 Joselino (48’). 4-1 Miguel Ángel (84’).

Incidencias: Unos 450 espectadores en las gradas del Municipal José María Fernández Amo de Santa Marta de los Barros en tarde agradable. La directiva local decidió declarar el partido de puertas abiertas para intentar la permanencia en la categoría. Campo en buenas condiciones.
El Moralo jugó con su segunda indumentaria, camisola y calzón azul y medias blancas, para no coincidir con la camiseta verdiblanca, pantalón blanco y medias verdes del Santa Marta.

Comentario: Colorín colorado la temporada del reanimado Moralo ha terminado. Las sensaciones por haber finalizado en la séptima plaza son muy buenas aunque con cierto sabor amargo. El equipo ha estado por encima de sus posibilidades, aunque se lo ganó a pulso por su compromiso y entrega a lo largo de toda la campaña para hacerse un hueco entre los mejores, pero se quedó sin premio. Después de haber luchado sin cesar durante siete largos meses por un puesto entre el cuarteto de cabeza los verdes cayeron en los dos últimos para quedarse sin opciones a la promoción y situarse en la peor posición de su trayectoria.

La falta de motivación en los últimos partidos aumentó en este último ante un rival que se jugaba la vida en la categoría. La pronta y exagerada expulsión del central Andrada (en la foto) permitió a los de Santa Marta hacerse con el control de la situación a partir de la media hora de juego. En el último cuarto de hora de la primera mitad los locales aprovecharon el desconcierto de los visitantes para decidir el choque con tres tantos. Al poco de la reanudación un nuevo gol selló definitivamente la salvacion los verdiblancos ante la apatía morala.

Los de Carlos Sánchez cerraron el partido y el ejercicio con un golazo obra de Miguel Ángel (en la foto) después de una bonita acción que finalizó el mediocampista regateando a tres contrarios y al portero para marcar escorado hacia la izquierda con un sutil toque. Ahí acabó la andadura del Moralo CP esta temporada en la que han rejuvenecido los valores del club de Navalmoral para sentar la base de lo que deberán ser los próximos años. Mimbres, ilusión, ganas, fuerzas, ánimos... y todo lo que se nos ocurra para estimular sin faltar a la verdad, hay de sobra para que los seguidores verdes puedan seguir confiando en un proyecto que arrancó con muchas reservas pero que también con mucha humildad ha sabido consolidarse por el bien del fútbol moralo.

37ª jornada. TESTIGO DE UN DESCENSO

Moralo: Iván Fanjul, Dani, Arellano, Andrada, Barbero, Iván (Toribio, 67'), Fran Mancha, Robert (Adri, 67'), Oliver, Jarillo (Juli, 67') y Juanjo.

Plasencia: Edu, Kamara, Fran, Héctor Mena, Teto (Cristian, 64'), Manu, Caballero (David Albarrán, 58'), David Mora, David Alejo, Jonathan (Merino, 75') y Sergio.

Árbitro: Aparicio Álvarez, de la delegación de Don Benito. Estuvo regular. Amonestó con tarjeta amarilla a los moralos Andrada, Juanjo y Oliver; y a los placentinos Héctor Mena y Teto.

Goles: 0-1 David Alejo (57'). 0-2 David Alejo (67').

Incidencias: Algo menos de 300 espectadores en las gradas del Municipal de Navalmoral en tarde calurosa, con mínima presencia visitante. Rectángulo de juego, como es habitual, muy irregular. Por las lluvias caídas en la noche anterior estuvo algo blando. Los jugadores locales saltaron al césped con una camiseta en la que se leía "Ánimo Gallardo!!" (en la foto de arriba), en alusión a la fractura del peroné derecho que sufrió en el entrenamiento del pasado jueves por el mal estado del campo. Al final del encuentro jugadores y aficionados moralos se despidieron con aplausos.

Comentario: La despedida casera del Moralo CP fue triste. No pudo dedicar una victoria a sus seguidores y vio cómo la UP Plasencia se hundía a la Regional Preferente. El cuadro placentino estaba obligado a ganar, lo que hizo, y esperar las derrotas de sus rivales por la salvación, Ciudad de Plasencia y Sanvicenteño, lo que no ocurrió. Por su parte, el equipo de Navalmoral buscaba afianzarse en la sexta plaza dándose una alegría con sus aficionados, pero la motivación no fue la necesaria. Ahora deberá sumar un punto en la última jornada para al menos asegurarse la séptima, que tampoco está nada mal.

El partido tuvo dos caras bien distintas. Durante el primer periodo ninguno de los equipos apenas tuvo ocasiones para marcar dado que ninguno tomó el mando del juego descaradamente. El Moralo respetó en exceso a un Plasencia que estuvo ansioso y con poca confianza. Las carambolas para salvar la categoría eran una quimera a estas alturas de campeonato para los placentinos y eso ni tan siquiera les liberó en los primeros 45 minutos. Sólo el defensa Kamara estuvo cerca de inaugurar el marcador tras un cabezazo que se perdió alto por poco a la salida de un córner.

En la segunda mitad sí que existió emoción. La UPP dio más velocidad a la circulación del balón y comenzó a llegar a la portería morala con más asiduidad mientras que el cuadro de Carlos Sánchez continuó con la apatía. Pero todo cambió con el 0-1 del ex moralo David Alejo. Un saque de banda por la izquierda lo prolongó un jugador placentino dentro del área para que Alejo, libre de marca, remachara a las redes con la cabeza delante de Iván Fanjul (en la foto).

El tanto despertó a los verdes, que poco después dispusieron de la primera acción clara para empatar. El capitán Oliver disparó fuerte por bajo desde la frontal del área, Edu rechazó el balón y Fran Mancha, con todo a favor, no acertó a superar al guardameta.

Al rato quien no perdonó otra vez delante del portero fue, de nuevo, Alejo (en la foto junto a Iván). Un buen servicio desde la derecha de Jonathan lo aprovechó el goleador jerteño para batir a bocajarro con el pie al cancerbero local y subir el esperanzador 0-2 al marcador.

A partir de la clara desventaja al Moralo le entraron las prisas por reducirla y mereció hacerlo por insistencia. Gozó de un par de ocasiones muy claras para hacerlo. Primero Dani probó suerte con un zambombazo desde fuera del área que el travesaño repelió y después Juanjo, tras plantarse solo delante del portero, con una vaselina que acabó en las manos de Edu sin excesivos problemas.

Así se cumplió el final del partido y el periplo del histórico Plasencia por categoría nacional. Al Moralo le sobrará también la última jornada, aunque en ella tendrá como mayor aliciente intentar recuperar la sexta posición y de paso 'ayudar' al otro equipo placentino del grupo, el Ciudad de Plasencia, todavía con algún problemilla para asegurar la permanencia.

36ª jornada. INMERECIDO CASTIGO

Imperio: Sebas, Francis, Pedro José, Carlos, Raúl Morales, Chico, José Ángel, Perico (Aranda, 60'), Javi Ramos, Candela y Sebas Scalise (Matías, 68').

Moralo: César Carrasco, Asiel, Iván, Dani (Juli, 78'), Toribio, Jarillo (Piti, descanso), Arellano, Manu, Oliver, Juanjo y Fran Mancha (Adri, 78').

Árbitro: De Dios Montero, de la delegación de Plasencia. Regular, permisivo con las faltas de los locales. Amonestó con cartulina amarilla, por el Imperio, a Pedro José, Raúl Morales y Candela; y por el Moralo a Manu y Asiel.

Gol: Chico (71').

Incidencias: Sólo 60 espectadores, contados uno por uno, en noche calurosa en el estadio Romano de Mérida. Terreno de juego en perfecto estado, aunque muy rápido, al haber sido regado minutos antes del inicio. El partido se jugó a las 21:30 horas, al término del Mérida-Cartagena de Segunda División B, por lo que fue el último en finalizar de la jornada. El Moralo cambió su habitual pantalón blanco por el verde.

Comentario: Los de Carlos Sánchez se fueron de vacío de la capital extremeña en un partido en el que superaron a sus rivales en todo menos en el marcador. Buena imagen la ofrecida por el conjunto de Navalmoral, que, a pesar de todo, sigue dependiendo de sí mismo para asegurar la sexta plaza. Lo hará si en las dos últimas jornadas sale airoso ante la casi descendida UP Plasencia y el casi salvado Santa Marta.

El Imperio comenzó dominando, aunque sin generar excesivo peligro. En el minuto 2, César Carrasco salvó un remate de Perico. Salvo esa ocasión, en los primeros minutos no hubo oportunidades claras de gol. El primer acercamiento del Moralo llegó en el 22. Buena combinación entre Fran Mancha y Manu, que a punto estuvo de rematar.

A partir de ahí el once del Campo Arañuelo empezó a enseñar sus armas. Toribio (en la foto), el más incisivo de los verdes, dio otro aviso con un tiro que rozó en un defensor local y se marchó fuera por poco.

En la reanudación, el Moralo fue a por el partido sin complejos. En el minuto 47, Toribio lanzó un durísimo zurdazo por bajo al que el meta Sebas respondió tocando la pelota lo suficiente para enviarla al palo. Los de Pacomio reaccionaron con un cabezazo de Pedro José en el 64 que se marchó fuera. A renglón seguido, fue de nuevo Toribio el que casi adelanta a los de Navalmoral, en un córner que sacó muy cerrado y se fue envenenando. Sebas tuvo que emplearse a fondo.

En el 71 llegó el único tanto del partido. Buena jugada de ataque del Imperio y, tras un rechace, la caza Chico y manda el cuero a la red. Excesivo castigo para un Moralo que nunca le perdió la cara al encuentro.

En los minutos finales los verdes lo intentaron. La buena noticia fue el debut del máximo goleador juvenil Adri (en la foto), que a sus 16 años mostró buenos detalles técnicos. Un cabezazo suyo con mucha intención se marchó dos metros a la izquierda del marco imperialista. Desde ahí hasta el final, el Moralo siguió intentándolo. César Carrasco respondió con un paradón a un testarazo de Aranda. Y casi en el descuento, Toribio se sacó otro misil que no encontró puerta por poco: se fue al exterior de la red.
En definitiva, buena imagen de un Moralo que se ha reencontrado con el buen juego, aunque sigue su mala racha de resultados en los partidos de fuera de casa.

(crónica y fotos realizadas por Luis Moral, excelente compañero y mejor amigo)

35ª jornada. APRIETA LOS DIENTES

Moralo: Iván Fanjul, Dani, Arellano, Andrada, Asiel, Fran Mancha (Miguel Ángel, 94’), Robert, Oliver, Manu, Juanjo (Diego Carrasco, 88’) y Gallardo (Jarillo, 76’).

Villanovense: José Fuentes, Jaraíz, Mora, Chamorro (Pablo Valencia, descanso), Edu Jurado, David Carmona (Valverde, 80’), Samuel, Damián (Willy, 59’).

Árbitro: Sánchez Serrano, de la delegación de Badajoz. Mal, se equivocó mucho y fue muy permisivo y tarjetero. Expulsó al local Robert (63’) por doble cartulina amarilla. Además mostró tarjeta de ese color a los moralos Andrada, Arellano y Oliver; y a los visitantes José Fuentes, Chamorro, Edu Jurado y Pajuelo.

Gol: 1-0 Robert (8’).

Incidencias: Algo menos de 300 espectadores en las gradas del Municipal de Navalmoral en mañana soleada pero fresca. Campo de juego en pésimas condiciones, muy irregular. Para evitar coincidencias de colores el Villanovense cambió su indumentaria habitual por camisola y medias azul oscuro y calzón negro.

Comentario: El conjunto de Navalmoral volvió a probar el dulce sabor de la victoria a costa de un equipo que jugará por ascender a Segunda B y que en líneas generales decepcionó. El Villanovense se clasificó matemáticamente para jugar la promoción pero lo hizo gracias a que el quinto clasificado, el Badajoz, perdió también su envite. El Moralo recuperó el espíritu luchador de hace algunas semanas y se hizo acreedor de un triunfo muy merecido gracias a esa casta y ganas que le pusieron sus jugadores a lo largo de los 90 minutos de juego. Además, con el premio de los 3 puntos los verdes rescataron la sexta plaza e intentarán defenderla a capa y espada en las tres últimas jornadas de la temporada.

El partido frente al Villanovense comenzó con buen ritmo. En el tercer saque de esquina casi consecutivo que botó el cuadro local en los primeros minutos llegó el tanto que a la postre resultó definitivo. El capitán Oliver (en la foto de arriba) sacó muy cerrado para que Robert tocara ligeramente lo justo para mandar el cuero al fondo de las redes ante la pasividad visitante y subir el 1-0 al marcador.

El gol serenó mucho a los de Carlos Sánchez durante toda la primera mitad y estuvieron cerca de aumentar la ventaja con dosis de buen fútbol ante unos contrarios a los que les pudo la ansiedad para hilvanar jugadas que realmente comprometieran a Iván Fanjul. La acción más clara para los locales antes del descanso la protagonizó Fran Mancha después de plantarse solo delante de José Fuentes. El mediocampista moralo quiso cruzar por bajo el balón a la salida del portero pero éste, atento, adivinó la intención y logró rechazarlo para que un compañero prolongase el despeje en el área pequeña.

En el segundo periodo la iniciativa en el juego continuó con alternativas hasta que el Moralo sufrió la rigurosa expulsión de Robert por doble amonestación. Pero antes de eso, dentro del primer minuto, el propio mediapunta realizó la jugada personal más espectacular del encuentro. Se fue de dos rivales en dos palmos para ganar la línea de fondo, pasó atrás hacia Gallardo pero su disparo volvió a encontrar la intervención del cancerbero serón por bajo. Esa acción pudo decidir definitivamente el choque aunque afortunadamente para el equipo de Navalmoral no se acordó de ella al final.

En superioridad numérica el control del balón, ligeramente, correspondió al Villanovense aunque sin mordiente en ataque. El conjunto de Villanueva de la Serena fue incapaz de disparar con peligro entre los tres palos en todo el partido. Apenas algunos lances aéreos que abortó sin excesivos problemas Iván Fanjul y algunos disparos lejanos que se perdieron fuera. Ese fue todo el balance ofensivo de los dirigidos por Domingo Suero. Los moralos, más cómodos sobre el maltrecho césped, practicaron mejor el juego directo e incluso a la contra tuvieron sus opciones para conseguir un resultado más amplio y tranquilizador.

Así dio el Moralo la bienvenida a los 51 puntos y se olvidó de la lamentable racha de seis jornadas consecutivas sin ganar que le relegó a un segundo plano en la pelea por un puesto en la fase de ascenso. De todas formas no se puede pedir más a esta plantilla entregada en el objetivo de devolver viejos laureles al club, a su club, aunque sea defendiendo la sexta plaza. La primera vuelta acabó con 30 puntos; en esta segunda podrá sumar los mismos si logra ganar los tres encuentros que restan. Difícil empresa porque a estas alturas las fuerzas andan justas, aunque no se renuncia a asegurar así esa formidable posición en la clasificación.

34ª jornada. CAÍDA A LA SÉPTIMA PLAZA

La Estrella: Riobó, Ezequiel, Luis Martínez, Redondo, Mario Fuentes, Víctor Moriano, Mario Tomé (Amador, 82'), Tomy, Misi (Ortiz, 78'), Julio Pecero y Dani Ávalos.

Moralo: César Carrasco, Iván (Jarillo, 65'), Toribio, Andrada, Asiel, Arellano, Fran Mancha, Juanjo, Oliver, Manu y Gallardo (Diego Carrasco, 85').

Árbitro: Pérez Ramos, de la delegación de Plasencia. Estuvo regular. Amonestó con tarjeta amarilla a los locales Tomy y Riobó; y a los visitantes Iván, Asiel y Toribio.

Incidencias: Algo más de 200 espectadores en las gradas del Polideportivo Municipal 'Cipriano Tinoco' de Los Santos de Maimona en tarde desapacible por la lluvia. Rectángulo de juego en malas condiciones, con mucha agua y barro. Antes del inicio del partido el club local sorteó 'La Gran Cagada', que consistió en ver en qué lugar del campo, dividido en pequeñas parcelas, hizo sus necesidades una vaca. Los 2.000 euros de premio fueron a parar a un familiar del jugador local Mario Tomé.

Comentario: El Moralo, con el punto conseguido sobre un barrizal, rompió la sangrante racha de cinco derrotas consecutivas. El trabajado empate con La Estrella debe inspirar confianza al cuadro de Navalmoral para encarar las últimas cuatro jornadas de Liga y olvidarse de una cruel fase de campeonato que le ha dejado sin opciones de jugar la promoción y en serio peligro la meritoria sexta posición. De hecho, a pesar de sumar en esta ocasión, su inmediato perseguidor, Jerez, ganó y le arrebata ese puesto para caer al séptimo.

El choque en Los Santos lo marcó el mal estado del campo debido a la lluvia. La Estrella y Moralo fueron obligados a practicar el juego directo porque no hubo posibilidad de practicar ningún otro. En la primera parte se pudo ver algo más de fútbol, con ocasiones para marcar incluso de ambos equipos, pero a medida que fueron pasando los minutos en la segunda, con un rectángulo de juego cada vez más imposible y peligroso para los jugadores, apenas existió.

En los primeros 45 minutos los santeños tuvieron oportunidades para abrir el marcador con acciones comprometidas sobre el portal de César Carrasco. La ocasión más clara la propició el debutante juvenil moralo Asiel con el riguroso penalti que le señaló el colegiado. El local Víctor Moriano pegó mal al balón desde el punto fatídico y lo mandó fuera de los tres palos visitantes. Mientras tanto los de Navalmoral continuaron también intentando poner en apuros al cancerbero Riobó, sobre todo a balón parado, pero no lo consiguieron.

Después del descanso la lucha sobre el barro para guardar la verticalidad siguió pero ya las llegadas a las áreas con cierto peligro fueron contadas. En el Moralo el incansable Juanjo no dio por perdida ninguna pelota para intentar enviarla sobre la posición adelantada de Gallardo, aunque la pesadez del campo y de las piernas no dejaron ningún lance claro. En el conjunto rival también se acumularon buenas intenciones pero nada más. La defensa de cinco hombres que tejió Carlos Sánchez en este partido fue infranqueable para La Estrella.

Así se llegó al final de un encuentro que debe levantar el ánimo a la plantilla morala después del esfuerzo que realizó para obtener un punto. Aunque con algunas carencias propias de las circunstancias del partido y de las secuelas de las últimas cinco derrotas seguidas que llevaba, el equipo recuperó el espíritu luchador e ilusionador de las primeras treinta jornadas. Ahora es tiempo de confiar en volver a ser quien fue para primero recuperar la sexta plaza con sus principales armas y para después volver a trazar una sonrisa de satisfacción en sus aficionados tras el pitido final de los partidos.

33ª jornada. ADIÓS AL SUEÑO

Moralo: César Carrasco, Fran Mancha, Arellano (Diego Carrasco, 61'), Andrada, Barbero, Toribio (Dani, 32'), Robert (Jarillo, 61'), Oliver, Manu, Juanjo y Gallardo.

Badajoz: Moisés, José Domínguez, Germán, Soares, Vilarchao, Gabri, Letu (D’Amico, 65'), Sandro, Bolaños (Ray, 54'), Jorge Ortiz y Juan Germán (Alex Herrera, 84').

Árbitro: Arias Domínguez, de la delegación de Almendralejo. Mal. Se equivocó, pitó y amonestó mucho en un partido que no fue para tanto. Mostró cartulina amarilla a los locales Andrada, Barbero, Manu, Juanjo, Fran Mancha y Oliver; y a los visitantes Vilarchao, Gabri, Letu, Sandro, Jorge Ortiz y Juan Germán.

Goles: 0-1 Jorge Ortiz, de penalti (12'). 0-2 Gabri (24').

Incidencias: Unos 200 espectadores en las gradas del Municipal de Navalmoral en mañana soleada. Rectángulo de juego en malas condiciones, muy irregular. El equipo visitante jugó con calzón negro para no coincidir con el blanco del local. El partido lo televisó en directo Canal Extremadura.

Comentario: Quinta derrota consecutiva de un Moralo que se hunde en su propia inoperancia. Con este nuevo encuentro perdido se despide de luchar por la cuarta plaza y deberá pelear mucho por intentar mantener la sexta que ocupa desde hace varias semanas, la peor de toda la temporada. Los verdes, hasta ahora, han disfrutado no sólo de una relativa cómoda ventaja sobre sus perseguidores sino que aspiraban al premio de la promoción. A partir de ahora ni una cosa ni otra. Su estabilidad en la clasificación corre serio peligro.

El conjunto de Navalmoral se podría haber tomado el choque con el Badajoz como un punto de inflexión. Ambos equipos decepcionaron por completo teniendo en cuenta lo que se jugaban. Más el Moralo que aumenta su lamentable racha sin puntuar con el apoyo de su público, que por cierto fue considerablemente menor que en otras citas, y con las cámaras de la televisión autonómica en directo como testigo. La mínima reacción que se le vio frente al Cacereño sólo una semana antes fue olvidada en Miajadas y refrendada en casa ante el cuadro pacense. Es momento de una terapia de grupo para saber a dónde quiere ir el equipo en las últimas cinco jornadas del campeonato. Porque no es lo mismo acabar de más a menos después de haber cumplido con el principal objetivo de la permanencia, como la tendencia actual refleja, que hacerlo de más a menos y encontrarse una buena clasificación como recompensa.

Ante el CD Badajoz el Moralo acentuó su falta de frescura. Es cierto que al rival se le puso muy pronto de cara el encuentro sin hacer demasiados méritos, pero es que a lo largo de los 90 minutos apenas halló oposición. Tras el saque de una falta lejana Andrada zancadilleó a Gabri dentro del área para que su compañero Jorge Ortiz transformara el penalti en el 0-1 a pesar de que César Carrasco estuvo cerca de detener el lanzamiento. Poco después, un saque de puerta en largo del cancerbero Moisés tropezó en Barbero y sin dejar caer el balón Gabri (en la foto de arriba junto al local Juanjo) enganchó un voleón cerca del círculo central que sorprendió al guardameta local para establecer el 0-2.

Con ese marcador tan fácil y efectivo poco antes del minuto 25 el cuadro de Carlos Sánchez quedó muy tocado y el de Fael se hizo fuerte aportando al juego muy poco.

En la segunda mitad el Moralo quiso la pelota pero apenas le sirvió para nada. Los únicos apuros que les llegó a los blanquinegros fueron a balón parado. El más claro tras botar un golpe franco lateral Diego Carrasco que peinó hacia atrás Manu para que Oliver desperdiciara por poco, en inmejorable posición y a pesar de tirarse al suelo, una ocasión manifiesta de gol en el segundo palo. En esa acción tuvieron la posibilidad los moralos de meterse en el partido antes de llegar al ecuador del periodo.

Por su parte el Badajoz, poco después, también malogró nítidas oportunidades para sentenciar el duelo. Juan Germán tiró fuera cruzado ante la media salida de César Carrasco y Sandro hizo lo propio después de que el balón le diera un bote extraño por el mal estado del césped.

En definitiva penoso espectáculo de dos adversarios que luchaban por la plaza que resta por concederse para disputar la promoción de ascenso. Uno de ellos sigue en la riña por ella, el otro ha quedado malparado y ha ingresado en la UCI. La Estrella, Villanovense, Imperio, Plasencia y Santa Marta, por este orden, son los antídotos que deberán tomar los de Navalmoral frente al mal de altura para que les sirva de revulsivo y acaben la campaña dignamente.

32ª jornada. EL EQUIPO SE DESINFLA

Miajadas: Pedro Jesús, José Ángel (Tena, 29'), Torres, Cuartana, Javi Gómez, Chico Ledesma, Piji (Israel, 58'), Ramiro, Barrantes (Felipe, 67'), Aguinaco y Carlos.

Moralo: César Carrasco, Dani, Arellano, Andrada, Barbero, Manu, Toribio (Fran Mancha, 58'), Oliver (Emilio Gil, 58'), Robert (Miguel Ángel, 69'), Juanjo y Gallardo.

Árbitro: Domínguez Márquez, de la delegación de Cáceres. Mala actuación por ser tarjetero y casero en la mayoría de las decisiones comprometidas. Mostró cartulina amarilla a los locales Pedro Jesús, Cuartana, Ramiro, Felipe y Tena; y a los visitantes Arellano, Andrada, Robert y Gallardo.

Goles: 0-1 Gallardo, de penalti (19'). 1-1 Carlos (31'). 2-1 Javi Gómez (53'). 3-1 Felipe (89').

Incidencias: Unos 200 espectadores, que entraron gratuitamente, en el Municipal de Miajadas en la soleada mañana de Jueves Santo. El Moralo cambió su habitual calzón blanco por el verde para no coincidir con el del Miajadas.

Comentario: La Liga se le está haciendo muy larga al cuadro de Navalmoral. Acumula cuatro derrotas consecutivas que le han estancado en la sexta posición, ahora a seis puntos de la cuarta plaza y con tres más que su inmediato perseguidor, pero se le intuye un calvario de aquí al final. La desventaja que tiene con quienes le preceden en la tabla y la ventaja que disfruta con quienes le persiguen demuestra que a pesar de lo mal que lo ha hecho en el último mes el equipo se mantiene con posibilidades de alcanzar la zona de promoción. Eso dice mucho del buen trabajo que ha hecho antes de este nefasto tramo liguero, y aún así puede echar al traste su buena campaña bajando de la peor plaza donde ha estado a lo largo de toda la temporada, la actual sexta.

En Miajadas al Moralo le faltó actitud, confianza e ilusión por lograr el triunfo. Ante un rival que manifestó los problemas por lo que está atravesando en la clasificación el conjunto de Carlos Sánchez evidenció, incomprensiblemente, falta de ganas, de no dar por un balón por perdido, de lucha... además de pegada arriba y contundencia abajo. Jugó una pasable primera media hora de juego en la que pudo casi decidir el choque y finalmente se vio superado por un Miajadas que lo único que puso sobre el campo fue ímpetu y brega para llevarse la victoria, características de un Moralo que ahora es una caricatura de lo que fue. Así no, por favor, así no...

Después de que arrancaran los miajadeños con algo de prisas por llegar al portal de César Carrasco, sin que éste tuviera que intervenir con apuros en ninguna ocasión, los verdes se adelantaron en el marcador. Un buen pase de Toribio al hueco lo aprovechó Gallardo para plantarse solo delante de Pedro Jesús, pero el guardameta lo derribó claramente cuando le regateó. El pésimo colegiado señaló el penalti pero le perdonó la expulsión al portero, que nada pudo hacer ante el disparo del propio Gallardo (en la foto de arriba) para establecer el 0-1. El gol fue dedicado a Juanjo por haber sido padre de un niño el día anterior (foto de abajo).

En los siguientes minutos el Moralo fue superior pero sin buen juego. En unos segundos, con dos claras acciones, pudo decidir el partido a su favor pero el cancerbero local estuvo certero en sus intervenciones. Primero al abortar un mano a mano con Juanjo enviando el balón a córner y segundo, tras el saque de esquina, desviando de nuevo a córner un cabezazo de Andrada que se colaba a gol. Pero lo que es el fútbol, del 0-2 se pasó al 1-1. Una rápida acción por la derecha del ataque local lo finalizó a placer Carlos sólo un minuto después para devolver las tablas al marcador. Su compañero Piji, en buena posición, estuvo cerca de marcar con el tiempo cumplido, pero primero César y después Arellano alejaron el peligro sobre su portería. Con esa igualada, en líneas generales justa, se llegó al descanso.

En la segunda mitad el equipo de Navalmoral volvió a entrar algo frío al campo. Una falta lateral al borde del área la convirtió en el 2-1 Javi Gómez al tocar levemente el lanzamiento por bajo. Ahí acabó de hundirse el Moralo. Ni los rápidos cambios desde el banquillo mejoraron el panorama. El miajadeño Carlos obligó a César a rechazar su tiro después de una bonita jugada personal por la izquierda en otro contragolpe tomatero.

Lo más peligroso que hicieron los de Carlos Sánchez en el segundo periodo fueron sacar faltas al área sin ninguna consecuencia. Sólo el incansable Juanjo (en la foto), con un disparo cruzado dentro del área que se marchó fuera por poco, pudo cambiar el sino del encuentro. Poco después, Emilio Gil desperdició un libre directo en la media luna del área estrellando el balón en la barrera. Todo ese fue el potencial ofensivo del Moralo para no intentar perder. Ni tan siquiera dominó la pelota con autoridad.

Con unos verdes incapaces de crear apuros y unos rojos conformándose con la mínima victoria llegó el último gol en el último minuto del pésimo partido. Un golpe franco botado por Emilio Gil desde el centro del campo se transformó en un contraataque que lideró el ex moralo Juanqui Aguinaco para marcharse como una bala por la derecha hasta pisar área y ceder el tanto, cuando le salió a la desesperada César Carrasco, a su compañero Felipe que marcó sin oposición a puerta vacía. Triste final para un Moralo alicaído y tocado. Sus piernas y sus cabezas, su fondo físico y mental, tienen que dar para mucho más sino quiere perder más partidos y más puestos, con lo que desluciría su extraordinaria campaña.

31ª jornada. CERCA DE LA SORPRESA

Moralo: César Carrasco, Dani, Arellano, Andrada, Barbero, Manu, Toribio (Diego Carrasco, 80’), Oliver (Jarillo, 85’), Robert (Miguel Ángel, 84’), Juanjo y Gallardo.

Cacereño: Josete, Roberto, Palero, Tito, Jurado, Lolo, Estévez (Valtierra, 72’), Chumi, Sergio, Rai (Guerrero, 85’) y Rocha.

Árbitro: Corchado Nieto, de la delegación de Mérida. Pésima actuación por ser tarjetero y no acertar en acciones clave del partido. Expulsó por doble cartulina amarilla al cacereño Sergio (82’). Además mostró tarjeta de ese color a los locales Andrada, Barbero, Arellano y Dani; y a los visitantes Palero, Jurado y Rai.

Goles: 1-0 Gallardo (17’). 1-1 Rai (20’). 1-2 Rai, de penalti (77’).

Incidencias: Unos 550 espectadores en las gradas del Municipal de Navalmoral, de los cuales varias decenas llegaron procedentes de Cáceres. Tarde soleada. Césped en malas condiciones, irregular y duro. Antes del pitido inicial se guardó un minuto de silencio en memoria del ex directivo y socio del club local, Elías Domínguez. El Cacereño jugó con camisola y medias rojas con calzón negro por coincidir su primera equipación con la del Moralo.

Comentario: Partido intenso que ningún equipo mereció perder. El Moralo echó mano de lo que le ha caracterizado a lo largo de toda la temporada, mucha casta, pero no le fue suficiente para puntuar ante un Cacereño que se llevó inmerecidamente el triunfo gracias a un penalti inexistente. Con esta derrota el equipo de Carlos Sánchez acumula tres consecutivas para cosechar su peor racha de la temporada. Así no pudo prolongar los siete encuentros seguidos en casa que llevaba sin perder, con cuatro triunfos enlazados, que le habían dado consistencia a la ilusión por introducirse en el cuarteto de cabeza. Quien no faltó a su cita con el gol fue Gallardo, que marcó por tercer partido consecutivo en el Municipal aunque esta vez no le sirviera para festejar con el equipo una victoria.

Nada más comenzar el líder Cacereño se hizo dueño del balón y en los primeros cinco minutos acumuló un par de córners y otros dos faltas directas al borde del área que no tuvieron ninguna consecuencia. Eso sí, el Moralo, esperando atrás, fue el primero en avisar con peligro. Juanjo se marchó con velocidad para romper el fuera de juego y cuando se dispuso a disparar ante la salida del guardameta Josete fue derribado por Palero dentro del área. Ni el árbitro ni el asistente, quien quizás lo vio mejor, no señalaron penalti a pesar de las quejas del delantero.

Al rato, un golpe franco botado a la perfección por el capitán Oliver fuera del área lo cabeceó al fondo de las redes Gallardo elevándose entre la nube de jugadores. El cancerbero visitante se vio sorprendido a media salida y nada pudo hacer ante el duro testarazo del '9' verde. A partir de ahí el choque estaba donde quería el Moralo pero el cuadro de Cáceres demostró quién es el líder en el siguiente acercamiento a las áreas.

La zaga local no fue capaz de despejar un balón en la frontal y Rai, sin pensárselo dos veces y sin dejarlo caer, lo aprovechó para empalmar un precioso chutazo que se alojó en una escuadra del asombrado César Carrasco que nada pudo hacer. El 1-1 tranquilizó los ánimos de uno y otro conjunto porque a partir de ese momento hubo dominio alterno sin que ninguno pusiera en apuros al portero contrario.

La segunda mitad comenzó como la primera. Los cacereños quisieron la pelota desde el principio y a medida que fueron pasando los minutos les entró las prisas para llevarla lo más cerca posible del guardameta local. Los de Ángel Alcázar reclamaron un posible penalti de Andrada a Rai en una acción muy similar a la que sufrió Juanjo en el primer periodo con el mismo efecto para los árbitros. Poco después, en una de las pocas jugadas enlazadas del partido, el propio Rai pudo marcar pero disparó alto delante de la portería tras una buena acción por la izquierda de Rocha.

Durante los segundos 45 minutos el Moralo estuvo más agazapado buscando la sorpresa pero el rival no se dejó atrapar. Apenas algunos lanzamientos a balón parado comprometieron a Josete aunque los solventó sin excesivos problemas. Pareció que el empate le daba por bueno. Por su parte, el Cacereño, poco a poco, se vio maniatado y sin capacidad de generar peligro. Así hasta que en una acción limpia Rai se dejó caer ante el marcaje de Dani en un balón aéreo tras un saque de banda y el trencilla picó. El propio atacante visitante convirtió el inexistente penalti en el 1-2 tras una doble paradiña que despistó a César Carrasco y que casi se perdió fuera. Con este tanto Rai se colocó como el máximo goleador del grupo con dieciocho dianas.

Ni tan siquiera que el equipo de Navalmoral jugara los últimos minutos con un jugador más le permitió para encerrar al Cacereño en su área. El árbitro quizás quiso compensarle con una absurda y rigurosa expulsión al capitán Sergio. El Moralo controló la pelota pero su dominio fue estéril hasta el pitido final.

Al Moralo le tocará esperar para romper la mala racha y seguir con las serias posibilidades de hacerse con una plaza mejor que la gratificante sexta.

30ª jornada. DEMASIADAS FACILIDADES

Cerro: Manu, Dieguito, Jaime, Rodolfo, Gabi Frías, Belforti (Azevedo, 70'), Jose Cayado (De la Cruz, 65'), Germán, Pierucci, Cristo y Golo (Tino, 61').

Moralo: César Carrasco, Dani (Oliver, descanso), Toribio, Andrada, Barbero, Manu, Fran Mancha (Iván, 56'), Emilio Gil (Jarillo, 61'), Juanjo, Robert y Gallardo.

Árbitro: Morillo Cotano, de la delegación de Almendralejo. Estuvo mal para los dos equipos. Amonestó con cartulina amarilla a los locales Rodolfo, Gabi Frías, Belforti y Germán; y a los visitantes Juanjo y Robert.

Goles: 1-0 Cristo (2'). 2-0 Pierucci (16'). 3-0 Pierucci (21'). 3-1 Emilio Gil, de penalti (42'). 4-1 Cristo (43'). 5-1 Jose Cayado (60'). 6-1 Belforti (67').

Incidencias: Unos 250 espectadores en las gradas del campo José Pache en mañana soleada aunque con mucho viento. Rectángulo de juego en buenas condiciones a pesar de tener algunas calvas. El Moralo cambió su habitual pantalón blanco con uno verde para no coincidir con el del Cerro de Reyes.

Comentario: Un empinado Cerro se interpuso en el camino del Moralo. La media docena de goles que recibió el conjunto de Navalmoral refleja bien a las claras quien fue el gran dominador del partido. Últimamente parece que se le está haciendo muy larga la Liga a los de Carlos Sánchez, justo en el momento que estaban más cerca de asaltar la cuarta posición. El desgaste físico de los siete meses de campeonato que se llevan casi llega a la reserva de energía de los jugadores para encarar los dos últimos.

El segundo madrugón consecutivo para jugar en Badajoz (este más aún por el cambio al horario de verano) volvió a pasarle factura al Moralo. Con esta nueva derrota acumula cuatro seguidas fuera de casa y le han situado en la sexta plaza con menos opciones a la promoción de ascenso que hace un mes. Las tres próximas jornadas, que se disputarán en una sola semana, serán determinantes para conocer hasta dónde puede llegar el equipo de Navalmoral.

El choque en campo cerrista acabó en los primeros 20 minutos de juego. En ese momento el marcador reflejó un 3-0 para los locales de lo más elocuente. Y es que en la primera aproximación, en el primer error defensivo, el cuadro de Tinín abrió la cuenta goleadora. Con el encuentro cuesta arriba los verdes intentaron meterse en la pugna por los puntos pero les fue muy difícil.

Poco antes de reducir la desventaja en el marcador Gallardo remató a un poste, para que después otro disparo suyo acabara rechazado claramente con la mano por el local Rodolfo. El colegiado señaló el penalti y Emilio Gil lo transformó en un gol que animó a sus compañeros. Pero sólo durante su celebración, porque nada más sacar un nuevo despiste en la retaguardia permitió a los blanquiazules colocar el 4-1 antes del descanso.

En la reanudación, con un Cerro conformista y un Moralo herido, el juego decayó. Aún así los pacenses marcaron el quinto y el sexto tanto que definitivamente cerraron el partido con más de 25 minutos por delante. En medio quedó otro tiro a un palo de los de Navalmoral, esta vez al saque de una falta botada por Oliver. También quedaron en nada, en anécdota, algunas claras ocasiones del Cerro de Reyes para aumentar la goleada, incluido un penalti que omitió el trencilla, y algún acercamiento del Moralo que pudo acabar en susto para un equipo que va directo a luchar por una de las dieciocho plazas de ascenso a Segunda B.

Carlos Sánchez y sus jugadores deben meditar lo que quieren y pueden hacer en las últimas nueve jornadas de Liga. Tiempo tienen para seguir dando guerra, aunque ahora las fuerzas parezcan que les han abandonado. El orgullo debe estar intacto y con ayuda de la ilusión podrán recuperar las energías. A eso están obligados a agarrarse en estos momentos.

29ª jornada. MAL PARTIDO, PEOR RESULTADO

Unión Deportiva: Poli, Félix, Caballero, Perico, André, Jonny, Mañas (Leo, 70'), Pepe, Nando, Emilio Tienza (Negri, 80') y Álvaro (Nacho, 87').

Moralo: Iván Fanjul, Dani, Arellano, Iván, Andrada, Manu, Toribio, Oliver, Robert, Diego Carrasco (Jarillo, 63') y Gallardo (Miguel Ángel, 64').

Árbitro: Rangel Merchán, de la delegación de Almendralejo. Regular tirando a mal al equivocarse en la señalización del penalti que abrió el marcador. Mostró cartulina amarilla a los locales Leo y Nacho; y a los visitantes Iván Fanjul, Arellano, Iván y Toribio. Además también amonestó con amarilla al técnico moralo Carlos Sánchez.

Goles: 1-0 Emilio Tienza, de penalti (48'). 2-0 Álvaro (62').

Incidencias: Unos 300 espectadores en las gradas del vetusto El Vivero, que no pagaron entrada porque fue gratis, en mañana agradable. Este partido sirvió para despedir oficialmente a esta instalación pacense de casi cien años, la segunda más antigüa de España después de El Molinón de Gijón. Rectángulo de juego irregular con varias calvas, sobre todo en las áreas. Canal Extremadura Televisión lo transimitió en directo.

Comentario: En un choque feo el cuadro de Carlos Sánchez cosechó una nueva derrota fuera de Navalmoral con merecimiento. Nunca estuvo en el partido, le faltó ambición, y fue superado por una UD Badajoz que se encontró con un inexistente penalti para allanar el camino hacia el triunfo. Con este traspié enfría la ilusión por alcanzar la cuarta plaza, aunque sigue teniéndola a tiro a falta de las últimas nueve jornadas de la temporada. Lo más emocionante vendrá a partir de ahora en los dos últimos meses de campeonato.

El aburrimiento se instaló a lo largo de los 90 minutos de juego. El Moralo pareció dormido durante el primer periodo y nunca se encontró cómodo sobre el maltrecho campo. El cuadro de Badajoz dio un poco de más ritmo a la circulación del balón, lo que le permitió llegar con más claridad a la portería contraria, pero tampoco le ayudó para dominar el juego. Fue una primera mitad soporífera con un Moralo apático y desdibujado, y con una Unión Deportiva que quiso pero no pudo.

El mejor jugador del envite, el local Álvaro, fue quien imprimió el ritmo del partido. Suyas fueron las mejores ocasiones para marcar y en las dos acciones de los goles estuvo presente. En los primeros compases no pudo superar al guardameta moralo tras una indecisión defensiva para poco más tarde cabecear flojo y mal un buen servicio desde la derecha que finalmente Dani tuvo que despejar dentro del área pequeña. Jonny, desde fuera del área, obligó con una volea a rechazar a córner a Iván Fanjul en otra acción con cierto peligro de los pacenses.

Por su parte, el Moralo apenas llegó a las inmediaciones del veterano cancerbero Poli a no ser que fuera a balón parado. Así tuvo que despejar a córner después de un saque de falta lejano que botó el debutante en el once inicial Diego Carrasco. Tampoco Andrada y Toribio anduvieron finos para concretar en un lance dentro del área pequeña y acabaron desaprovechando su buena posición tirando la pelota fuera.

El destino del encuentro pronto cambió en la segunda parte. Un balón sobre Mañas se lo arrebató limpiamente el portero Iván Fanjul cuando el delantero se escoraba hacia su derecha. Sorprendentemente el colegiado señaló penalti por la caída de Mañas ante las lógicas e inútiles protestas de los jugadores verdes. El regalo lo agradeció Emilio Tienza para transformar en el 1-0 la inexistente pena máxima al engañar a Fanjul.

A partir de ahí el conjunto de Navalmoral entendió que debía hacer algo más para no salir derrotado de este enfrentamiento. Al cuarto de hora una buena acción dentro del área entre Arellano y Gallardo (en la foto) la culminó éste con un disparo cruzado que se estrelló en el lateral de la red. Y de lo que pudo ser el empate se llegó al 2-0 definitivo apenas minuto y medio después. Un saque en largo de Poli desde su portería lo cabeceó en el corazón de la defensa Dani con tan mala fortuna que lo prolongó hacia la izquierda y pillando descolocado a Iván Fanjul. El guardameta, en la frontal del área, corrió hacia el control de Álvaro, el único atacante, para taponar su disparo pero cuando quiso darse cuenta del error, retrocedió hacia su portería y el jugador unionista no perdonó. Desde el pico del área se acomodó el balón para dibujar una precisa y preciosa vaselina que acabó en el fondo de las mallas para cerrar el marcador.

A partir de ahí el Moralo quiso la pelota pero no hizo daño. Barbero, Fran Mancha, Emilio Gil y Juanjo, cuatro pilares importantes en distintas partes del campo para la escuadra verde, se echaron demasiado en falta. La Unión se olvidó de atacar y durmió el juego la última media hora para salirse con la suya. Pasará a la historia como el último vencedor en partido oficial en el Viejo Vivero.

Carlos Sánchez tiene tarea para los próximos días. Lo primero y más fundamental será intentar recuperar cuanto antes a sus hombres más habituales. Después recobrar el ánimo y la confianza de sus pupilos para el tramo más interesante y trascendental de la competición. Y es que el Moralo aún no ha dicho su última palabra.

28ª jornada. VICTORIA MUY SUDADA

Moralo: Iván Fanjul, Dani, Arellano, Andrada, Iván, Fran Mancha, Manu, Oliver, Emilio Gil (Toribio, 8’) (Diego Carrasco, 72’), Robert y Gallardo (Miguel Ángel, 74’).

Villanueva: Lolo, Leo, Romeo, Yves, Franco, Cholo (Claudio, 74’), Diego (Pocho, 69’), Tiago, Valentín, Gugu y Sacha (Ávila, 55’).

Árbitro: Jaramillo Arroyo, de la delegación de Badajoz. Estuvo bien aunque pudo ahorrarse alguna tarjeta. Amonestó con cartulina amarilla a los locales Andrada, Manu y Oliver; y a los visitantes Romeo y Cholo.

Gol: Gallardo (70’).

Incidencias: Unos 350 espectadores en el Municipal de Navalmoral, con presencia de aficionados visitantes, en mañana agradable con ligero viento. Rectángulo de juego irregular. El Sporting Villanueva jugó con su segunda indumentaria, camiseta rojiblanca, calzón y medias negras, para no coincidir con el verde del Moralo.

Comentario: En un disputado partido el Moralo sacó los valiosos 3 puntos sin ser superior al Sporting Villanueva. El juego y las llegadas al área de uno y otro equipo manifestaron mucha igualdad a lo largo de los 90 minutos y el equipo de Navalmoral supo rentabilizar las suyas mucho mejor. Con esta victoria, cuarta consecutiva en el Municipal, una de las plazas para disputar la fase de ascenso se acerca un poco más.

Ambos conjuntos protagonizaron un choque entretenido aunque carente de vistosidad. La pronta lesión del local Emilio Gil (en la foto justo antes de caer lesionado) desordenó un poco a sus compañeros durante varios minutos y privó a los de Carlos Sánchez de su juego al toque y pases en profundidad. Quizás fue lo que más se echó en falta en el Moralo, sin contar sus saques de falta o córner.

Los dos equipos quisieron ser los dueños del campo controlando el balón, pero el dominio se lo repartieron en distintas fases. El primero en avisar, aunque no fuese con claridad, fue el cuadro de Villanueva del Fresno con un cabezazo cruzado de Valentín que atajó bien Iván Fanjul. La réplica correspondió a Gallardo para los verdes. Después de controlar bien el cuero dentro del ára, se zafó de un contrario pero su disparo a bocajarro lo rechazó el cancerbero Lolo con muchos apuros. En una acción parecida en el otro área Valentín volvió a malograr la oportunidad para su equipo con un tiro por bajo que detuvo Fanjul.

Ya en la segunda mitad de nuevo el Sporting se topó con el guardameta moralo. En esta ocasión fue Tiago quien en semifallo y delante de Iván Fanjul no supo superarle tras un centro desde la derecha. Ahí se le acabó la pólvora a los rojiblancos. Por su parte, los de Navalmoral encontraron el premio en una acción aislada y rápida para anotarse el triunfo en el momento clave del encuentro.

Fran Mancha robó bien la pelota, pisó área, cayó ante la presencia de un rival y el rebote le cayó a Gallardo (en la foto) para anotar el 1-0. Con un chutazo a media altura desde la frontal del área el delantero verde sumó su segundo tanto consecutivo en casa para dar la victoria a su equipo. Fue la mejor forma de romper la monotonía, con paciencia y marcando en sus contadas intervenciones. El Moralo, desde entonces, se supo ganador atrincherándose atrás (pero sin pasar apuros) para pasar a jugar más pausadamente y buscar los contraataques. Eso acabó de incomodar a un Villanueva que lo intentó pero fue incapaz de comprometer con verdadero peligro. Acaso un lanzamiento lejano de Franco que Iván Fanjul rechazó por bajo en la recta final del partido.

El Moralo lleva siete enfrentamientos seguidos en casa sin perder, los cuatro últimos firmándolos con victorias. La ilusión por continuar dando guerra no se desvanece.

27ª jornada. MANIATADO Y ACORRALADO

Valdelacalzada: Carlos, Richard, Javivi, Ñete, Tello, Óscar, Álvaro (Jorge, 72'), David Lechón, Juanito (Roberto, 47'), Lolo Santos (Mera, 85') y Galo.

Moralo: César Carrasco, Dani, Arellano, Iván, Barbero (Jarillo, descanso), Fran Mancha, Toribio (Iván Fanjul, 32'), Robert, Emilio Gil (Miguel Ángel, 70'), Juanjo y Gallardo.

Árbitro: Asuar Fernández, de la delegación de Almendralejo. Pésima actuación, tolerable con los jugadores del Valdelacalzada e injusto con los del Moralo. Expulsó con tarjeta roja directa al visitante César Carrasco (30'), a su entrenador Carlos Sánchez (40') y al local Galo (43'). También expulsó, pero con doble cartulina amarilla, al moralo Juanjo (88'). Además amonestó con amarilla a los valvienses Juanito y Ñete; y a los visitantes Barbero, Iván, Emilio Gil, Robert, Miguel Ángel y Jarillo.

Goles: 1-0 Galo (21'). 2-0 Juanito, de penalti (33').

Incidencias: Unos 250 espectadores en el Municipal de Valdelacalzada en mañana agradable. Rectángulo de juego en buenas condiciones. Antes del pitido inicial se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento de la abuela del portero local.

La expedición morala salió con más de un cuarto de hora de retraso, se le averió el autobús antes de llegar a Mérida y tras reanudar la marcha estuvo detenida por obras en la autovía. Así las cosas el equipo llegó con tres cuartos de hora antes del inicio del encuentro y fue obligado a cambiarse y calentar rápidamente por el colegiado.

Comentario: No pudo ser y el equipo de Navalmoral se vino de vacío de un choque extraño que comenzó mal y acabó peor. Las decisiones arbitrales, sin ser decisivas pero sí machaconas, y la presión de los locales dentro y fuera del campo le sacó de quicio. El Valdelacalzada hizo su partido, le fueron consentidas numerosas faltas para ser incluso mucho menos castigado, y alcanzó tres puntos que le son muy importantes para olvidarse del descenso casi definitivamente.

Carlos Sánchez improvisó con unas parejas inéditas de centrales y mediocentros para encarar este choque, por lesiones y sanciones, y el experimento sólo le valió media hora. Hasta que el equipo recibió el 2-0 anduvo despierto y concentrado para llegar con peligro al portal de Carlos. Hasta el momento que el guardameta César Carrasco cometió penalti, fue expulsado y el Valdelacalzada marcó su segundo tanto el encuentro estaba siendo muy igualado, con acercamientos a las dos áreas. A partir de ahí se rompió definitivamente a favor del cuadro local.

De todas formas el Moralo ya estaba siendo castigado en exceso. Los valvienses reiteraron las faltas sobre Emilio Gil y Juanjo con el beneplácito del árbitro y eso acabó pasándoles factura porque el juego se endureció por ambas partes y los verdes salieron malparados.

Después de un buen inicio, y sobre todo de una acción muy clara en la que ni Gallardo (en la foto de al lado) ni Robert acertaron a comprometer a los contrarios, llegó el 1-0 en una rápida contra que culminó bien el local Galo con la cabeza. El gol dejó tocado a los de Navalmoral, que sólo diez minutos después volvieron a recibir una llegada muy clara, tras un jugadón de Lolo Santos, que terminó en penalti de César. La pena máxima la transformó en el 2-0 Juanito engañando a Iván Fanjul (en la foto de abajo) en su primera intervención.

Antes del descanso, el amarillo Galo también fue expulsado por propinar un puñetazo e insultar a Fran Mancha, que fue a interesarse por él al ver que sangraba por una ceja tras un lance aéreo con Dani. Ahí tuvo sus opciones el Moralo, al menos eso pensaron sus jugadores en el vestuario, y con igualdad numérica intentaron meterse en la pelea por los puntos durante toda la segunda mitad. Le fue imposible ya que el Valdelacalzada, bien plantado atrás, no permitió ningún contratiempo. Eso sí, Arellano fue objeto de un claro penalti del portero cuando faltaban diez minutos pero el árbitro, en su línea, no atendió a las razonables quejas visitantes.

Fue lo que acabó de hundir al equipo de Carlos Sánchez, que además sufrió una nueva expulsión. La protesta de Juanjo por una falta que recibió la convirtió el joven y mal trencilla en la expulsión del delantero moralo al mostrarle su segunda amarilla por protestar. Increíble pero cierto. El conjunto verde se desfondó definitivamente y dio por perdida cualquier posibilidad a sumar algún punto. Eso fue lo peor del partido ya que el Moralo perdió más que tres puntos. Las consecuencias de las tarjetas tras la redacción del acta pueden ser drásticas para su futuro más inmediato.

De todas formas el equipo debe levantarse y continuar pensando en positivo. Todavía tiene la motivación de alcanzar la cuarta plaza y todos los enfrentamientos son distintos. Con lucha, casta y orgullo seguro que no echará de menos a ningún compañero que no esté sobre el campo en las próximas citas. Todos a una, es sólo un tropiezo no una caída.

26ª jornada. OTRO TRIUNFO BALSÁMICO

Moralo: Iván Fanjul, Iván, Arellano, Andrada, Barbero, Fran Mancha (Toribio, 90+1’), Robert (Diego Carrasco, 74’), Oliver, Emilio Gil, Juanjo y Gallardo (Jarillo, 82’).

Ciudad: Luis, Chanca, Maxi (Álvaro, 85’), Kolo, Escalante, Juanito, Óscar (José Ángel, 69’), Víctor, Santi, Diego y Fran Díaz.

Árbitro: Castaño Torres, de la delegación de Mérida. Mal porque se equivocó mucho en sus decisiones. Expulsó con tarjeta roja directa al placentino Álvaro (90+3') por menospreciarle. Además mostró cartulina amarilla a los locales Andrada, Gallardo, Iván, Oliver y Emilio Gil; y a los visitantes Víctor y Fran Díaz.

Gol: 1-0 Gallardo (41').

Incidencias: Algo más de 300 espectadores, de ellos algunas decenas venidas desde Plasencia, en las gradas del Municipal de Navalmoral en mañana nublada y con algo de viento, que favoreció a cada equipo durante 45 minutos. Campo irregular, blando y algo resbaladizo por la lluvia de la noche anterior.

Comentario: En un choque muy equilibrado el Moralo se llevó el triunfo a balón parado. En la primera mitad los verdes fueron los dueños del balón y de las pocas ocasiones que hubo, pero en la segunda cedieron terreno e iniciativa a los magentas para apenas disfrutar de llegadas al portal contrario para sentenciar. Tampoco sufrieron ningún peligro sobre el suyo, el del debutante Iván Fanjul, perfecto en sus pocas intervenciones. La victoria les vuelve a acercar al cuarteto de cabeza.

El cuadro de Navalmoral no quiso perder ni un segundo tras el saque inicial. Tomó el mando y ya a los tres minutos acumuló tres centros al área rival que el Ciudad solventó sin mucho peligro. Tardó en reaccionar el equipo de Plasencia aunque una acción aislada e involuntaria le sirvió para meter el miedo en el cuerpo a los locales. Una indecisión entre Barbero e Iván Fanjul la salvó Arellano despejando el balón a puerta vacía, aunque sin ningún contrario en sus inmediaciones.

Poco después un buen pase en profundidad sobre Gallardo acabó con el delantero por los suelos tras regatear al portero. El jugador moralo se escoró demasiado para el dribling y cuando superó a Luis perdió la pelota y el equilibrio. Lo que sus compañeros reclamaron como penalti el árbitro lo castigó con tarjeta.

No obstante, y ya en la recta final del primer periodo, Gallardo (en la foto) se resarció y tras botar una falta Emilio Gil cabeceó con fuerza al balón para enviarlo al fondo de las redes y subir el 1-0 al marcador.

No tardó nada en reaccionar el Ciudad ya que en la jugada siguiente, y en su segundo y último acercamiento con peligro en todo el choque, Óscar marcó también con la cabeza pero en fuera de juego después de un envío desde la izquierda. Así acabó el entretenido primer tiempo aunque las ocasiones de gol escasearon.

Más aún lo hicieron en el segundo. Los guardametas apenas tuvieron que intervenir para desbaratar algún lance con marchamo de peligro. El Moralo se ordenó más aún en defensa y se preocupó más de contrarrestar las llegadas visitantes con rápidas contras que le pudieran dar la sentencia. Entretanto, el Ciudad de Plasencia quiso pero no pudo. Controló más el balón pero fue incapaz de superar el muro verde. Nunca llegó con claridad al área local.

Por su parte, los de Navalmoral gozaron de sólo dos oportunidades relativamente claras para marcar. Primero Emilio Gil probó fortuna desde lejos pero Luis rechazó bien por alto a córner. Y después, casi al final, Juanjo y Diego Carrasco se entretuvieron demasiado dentro del área con todo a su favor para hacer daño.

Quizás hubiese sido excesivo premio para lo que se vio en el partido, aunque el triunfo fue del todo justo porque el Moralo fue quien aprovechó mucho mejor sus contadas ocasiones y siempre manejó el ritmo del juego con y sin balón. Y es que cuando se va a entrar en la fase decisiva del campeonato el conjunto de Carlos Sánchez llega con fuerzas para intentar luchar por la cuarta plaza. A falta todavía de 36 puntos por disputarse todo puede pasar...